lunes, 22 de julio de 2013

EL JUICIO FINAL Y UNIVERSAL. (continuación)



SEGUNDA PARTE


Llegados a la atmósfera de la tierra, el sol, que alumbra más que nunca por la limpidez azul y luz que daban las interminables columnas de espíritus puros, apenas el sol era un crepúsculo ante tanta Majestad. 


En ese instante, se formaron dos grandes anillos cruzados que envolvían la tierra, con los espíritus de la cosmogonía. De la encrucijada o vértice, el Espíritu de Verdad colgó su ancla, dejándola caer hasta la mesa del Tribunal en la tierra, sobre el acta (que ya se encontraba labrada sólo a falta de firmar), y quedaron constituidos arriba, los tres tribunales espirituales, el de derecho, el permanente y el de justicia, formando el triángulo. El Espíritu de Verdad dijo en toda su Potencia y Majestad..."¡Hijos de la tierra!...Venid a juicio, la hora es llegada"...

Cuadros terribles se veían en ese instante; todos los hechos de los hombres pasaban a la vista de todos. Querían cubrirse para no mirar y huir, pero en vano; había que verlo, leerlo, acusarse en verdad cada uno a sí mismo; y mayor era la estupefacción, conociéndose los hombres de esta existencia, en todas sus anteriores, viéndose antropófagos, verdugos o tiranos. Pero el momento más terrible fué al llegar el martirio del Gólgota, que era en la misma hora que los sacerdotes lo celebraban en sus iglesias: aquí querían no ser, mejor que verse acusados en sus conciencias y llegó el estupor al máximo, al ver que las cuentas de todos habían llegado al día presente ajustadas y se veían completamente desnudos, todos los que se creían supremáticos; querían romper lanzas con los que tan miserables creían; los trabajadores. Ellos, que en espíritu se veían desnudos y con sus cuentas sin pagar, estando sus cuerpos vestidos de púrpura y oro, o de un correcto frac, u otras vestimentas supremáticas, viviendo bajo torres y cúpulas que en aquel momento solo servían para acusarles y aun no se desengañaban de su impotencia. 

Pasada su historia ante la vista de cada uno, el juez, rememoró, cómo en todos los tiempos se les había avisado y que al fin, les sorprende el juez desprevenidos. Pero que no teman; pues no van a oír la terrible voz de "Id malditos al fuego eterno", porque el Padre es todo amor y tiene sus moradas hospitales preparadas, las que se os muestran en este acto para que aun podáis asiros al ancla, acatando la ley única de amor, que nos da en el Código nuevo. 

En ese instante, el gran Dante con otros muchos, arrastró a todos a los mundos primitivos y no a todos les horrorizó. Ahora se les concedió la defensa, haciéndolo uno por todos los que no acataron, que fueron separados a la izquierda. Hubo grandes incidentes, siendo de notar uno, que reaccionando en aquel acto, se destacó de la grey cristiana; y después de una arenga hermosísima y valiente (en posesión del médium) y ya asido al ancla, desafiaba él solo a toda la grey; y como no podían acometerle los jefes, esta impotencia, levantó el ánimo en la deprimida grey y se le sumaron al valiente 3.755.000, que dijeron: "Somos conformes en ser los últimos y acatamos la ley". María entonces, seguida por Jesús y los misioneros se cubrieron su desnudez con vestidos de luz y aun se concedió un momento de reflexión, mientras el Espíritu de Verdad, en posesión, hablaba en el tribunal de la tierra, aclarando puntos y declarando el juicio terminado. Eran las tres en punto cuando se firmaba el acta. 

Este fue el terrible momento: el Espíritu de Verdad descubre toda su luz y parecía hincharse como si no cupiera en toda la cosmogonía y, de un soplo barrió todas las tinieblas de la atmósfera. La luz de la tierra empezó a verse en los espacios, y un... "¡Salve tierra bella, hija del sol, tus hermanos te saludan por Eloí; eres nuestra hermana menor, nuestro Benjamín; y nuestros amores más tiernos, son para tí. Loor al juez y su tribunal; loor a la madre de los misioneros y sus hijos; loor a todos los trabajadores; loor y alabanzas al maestro Espíritu de Verdad. Cantemos todos un hosanna al grande y único Eloí!"

El espíritu de Verdad, entre cantos y hosannas, vuelve a soplar y arrastró del espacio a todos los que no habían acatado la ley y estaban en espíritu, dando una transición de su presente existencia a los encarnados. Partió con su carga asida al ancla la humanidad redimida para presentarla al Padre y volvió para decir por boca del juez: "Consumatum est", y declaró la tierra en su Séptimo día, dejando a Jesús en posesión del médium para declarar el estado en que quedaba la tierra, terminándose el acto a las 5 de la tarde. 


Ahora bien; lo expuesto no es más que a título de participarlo al mundo, pues todo está escrito para darlo luego con todos sus pormenores. Entre tanto, pensar, que todos estáis juzgados y sentenciados; y oyendo la voz de vuestro mismo espíritu, sabréis si estáis en la ley o fuera de ella y aprovechad la transición que cada uno tiene en su presente existencia. Si en la ley estáis, quedaréis a disfrutar de la unión de los dos mundos (el material y el espiritual) bajo el solo credo espiritismo; bajo la única ley de amor y con el solo Eloí para su adoración en espíritu y verdad, cumpliendo todo lo prometido y observando este solo mandato: "Ama a tu hermano".

EL JUICIO FINAL Y UNIVERSAL. Tomado del libro El Espiritismo en su Asiento de Joaquín Trincado.


PRIMERA PARTE
¡Cuántos cuentos fantásticos e irracionales se han hecho del juicio final! ¡Qué escandaloso comercio hizo la iglesia católica y cristiana de ese acto que ha pasado desapercibido para sus materias!... Hasta parece que lo han tomado por una broma las religiones cuando tanto lo charlatanean en busca del dinero de los horrorizados creyentes prejuiciados, que están temiendo la caída de los montes que los aplasten; los huesos bailando, buscando sus compañeros para armarse en cuerpos y salir de las tumbas para oír el "Id malditos de mi Padre, al fuego eterno, que os está preparado"... ¡Farsantes!... ¿Temeríais por esto quizá al espiritismo, que os desmentiría? Pues nunca la tierra disfrutó de mejor fondo azul que el 5 de abril de 1912, día en que se cerró el Juicio y se firmó la Sentencia. Y ved la ironía de la justicia divina: Se pesaban todas las conciencias, durante las tres horas en que rememorábais la agonía de Jesús (pues fué Viernes Santo ese día), y mientras levantábais (en la intención), el patíbulo del Gólgota, el Juez del Padre, el anunciado por el mismo Jesús; el hijo del hombre que había de venir y el mundo lo recibiría, derribaba y enterraba para siempre en la tierra, la cruz y el Cristo; se justificaba a Jesús por toda la cosmogonía y el Espíritu de Verdad, posando su ancla salvadora sobre el acta que firmaba el Juez, era investido Jesús con la palma del vencedor y, el universo lo saludó................................. ................................................................................................................ Todo está escrito y lo leeréis en su día; pero no se puede menos de recopilar aquí un algo del acto más tremendo, más trágico y majestuoso que los mundos tienen y no se repite. Voy a dejar a la pluma decir la esencia, dando la primer palabra a Eloí en el testamento de Abraham.

"Y los siglos serán 36, desde que escribiré mi ley, hasta que la tierra la sabrá; y de este siglo mis hijos serán de luz, porque verán la luz de su Padre que les darán mis espíritus".

Isaías y todos los profetas y más tarde el apocalipsis, nos señalan diciendo que sería el juicio, "cumplido el tiempo, los tiempos y la mitad del tiempo" y nadie comprendió la fecha.

Mas fué dicho “Y los siglos serán 36, desde que escribiré mi ley, hasta que la tierra la sabrá". De Abraham a Moisés, son próximos 4 siglos; de Moisés (que escribió la ley) a Jesús, 18 siglos incompletos; y de Jesús al advenimiento del Espíritu de Verdad que él anunciaba, 18 siglos completos, que son 40; menos 4 de Moisés a Abraham, son los 36 siglos marcados por Helli a Abraham. Son éstos, "el tiempo, los tiempos y la mitad del tiempo".

Todos los profetas y Jesús dijeron: "Estad preparados porque la hora está cerca y no os tome como ladrón de sorpresa”. Y, efectivamente; (como han pasado todos esos siglos, que en el tiempo eterno no son un minuto...) a todos los cogió entretenidos y con las luces apagadas; no lo esperaban ya y mayor fué su sorpresa.

Mas las trompetas espirituales sonaron en las conciencias muchas veces, desde el 28 de Enero de 1912, en que se llamó a juicio por el Espíritu de Verdad, desde el tribunal de la tierra; porque desde ese día, se celebraron juicios particulares para oír las justificaciones de todas las religiones, en solidaridad cada una; a los estados civiles; a los libertinos y a los jefes de estado, quedando así todos preparados para el día de la sentencia.

Mas, si en todos los juicios no perdió la serenidad el Juez, le fué doloroso tener que recibir a justificarse al precursor Kardec porque sobre el espiritismo pesaba la amalgama espiritualismo. Las lágrimas de Kardec, no podrían menos de doler al hombre; pero la justicia es inexorable y el mismo Jesús fué el primero que dió el ejemplo justificándose ante el hombre, aun antes de ser formado el tribunal, con lo que quedaba Jesús, como intermediario entre los que se habrían de justificar y el juez que los habría de oír por el Padre y dió a cada uno lo suyo.

El acto de la sentencia duró 5 horas, que fueron como 5 millones de siglos para los que no esperaban prevenidos. Pero todo fué, según estaba ordenado por el Espíritu de Verdad, juez del juez.

A las doce meridiano en punto, se había constituído el tribunal, presenciando el acto 30 testigos más, muchos de los cuales, habían presenciado y oído los juicios particulares. Al dar las 12, se dió en la tierra la voz de "Juicio" a los cuatro vientos, en cuyo momento rompían el silencio de los espacios, las trompetas espirituales que herían las conciencias de todos los hombres de la tierra, cuyos espíritus eran sacados de sus cuerpos por la fuerza de la justicia, para comparecer ante los tribunales que eran tres: el de derecho, compuesto en la tierra por un juez y dos asesores; el tribunal permanente de la humanidad desde la venida de Adán y Eva y los misioneros, compuesto por los espíritus conocidos de Miguel, Rafael y Gabriel: y el tribunal Supremo de Justicia, por el Espíritu de Verdad y sus consejos.

Tan pronto se hubieron dado las voces en la tierra, el Juez, con sus asesores, en desdoblamiento, arrastró a toda la mayoría de la tierra hasta Sión, punto del tribunal de justicia, el que ya esperaba preparado con el tribunal permanente a la cabeza; y al llegar la mayoría de la tierra, espíritus libres y encarnados, guiados por Abraham, María y Jesús y todos los misioneros... todos a una voz dijeron ¡Justicia!...

En ese momento, llegaron a Sión todos los maestros de la cosmogonía y los tribunales del plano primero, encabezados por el del Sol, nuestro Padre en la materia. La columna se puso en marcha, viniendo a la cabeza el tribunal de la tierra, precediéndole las trompetas espirituales que resonaban estridentes en todo el universo y decían: "Un mundo va a ser juzgado"... Precedían al Tribunal, toda la mayoría de la tierra; detrás, el Tribunal permanente que traía las insignias de la justicia; detrás de éste, el Espíritu de Verdad con sus Consejos y les seguían todos los Tribunales y el universo infinito, cantando Hosannas.

Sigue en este link El Juicio Final. Conclusión

jueves, 9 de mayo de 2013

REFLEXIONES DEL MES DE MAYO. Por FMPDV

Hola
Se les saluda desde esta página dedicada a la reflexión y pensamiento metafísico.
Con algunas imágenes que se encuentran en la red, y son de uso público, quise hacerles unas postales con pensamientos de pensadores mundiales sobre la educación.




jueves, 31 de enero de 2013

LA NUEVA ERA.

INSTRUCCIONES DE LOS ESPIRITUS.
ALLAN KARDEC



             Dios es único  y Moisés el Espíritu que Dios envió en misión para darle a conocer, no sólo a los hebreos sino también a los pueblos paganos. El pueblo hebreo, fue el instrumento del que Dios se valió para hacer su revelación por medios de Moisés y los profetas, pues las vicisitudes de este pueblo eran a propósito para impresionar y rasgar el velo que ocultaba a los hombres la divinidad.

        Los mandamientos de Dios dados por Moisés envuelven el germen de la más alta moral cristiana, los comentarios de la Biblia restringían su sentido, porque los diez mandamientos de Dios no dejaron por esto de ser el frontispicios brillante, como el faro que debía iluminar a la humanidad en el camino que tenia que recorrer.

                 La moral enseñada por Moisés era apropiada al estado de adelanto en que se encontraban los pueblos que debía regenerar, y estos pueblos, medio salvajes en cuanto al perfeccionamiento de su alma, no hubieran comprendido que se pudiera adorar a Dios de otra manera que por medio de holocausto, ni que hubiese de perdonarse al enemigo. Su inteligencia, notable respecto de las cosas materiales y aún respecto de las artes y de las ciencias, estaba muy atrasada en moralidad, y no se hubiera sujetado al imperio de una religión enteramente espiritual; les era necesario una representación semi-material tal como la ofrecía entonces la religión hebrea. Asì es que los holocaustos hablaban a sus sentidos, mientras que la idea de Dios hablaba a su espíritu.



domingo, 20 de enero de 2013

TERCERA REVELACIÓN: EL ESPIRITISMO.

EL ESPIRITISMO
(Tomado de El Evangelio según el Espiritismo)

El Espiritismo es la nueva ciencia que viene a revelar a los hombres, con pruebas irrefutables, la existencia y la naturaleza del mundo espiritual y sus relaciones con el mundo corporal, nos lo presenta, no como una cosa sobrenatural, sino, al contrario, como una de las fuerzas vivas que incesantemente obran en la Naturaleza, como el origen de una multitud de fenómenos incomprensibles hasta ahora y relegados, por esta razón, al dominio de lo fantástico y de lo maravilloso. A estas relaciones es a las que Jesús hace alusión en diferentes circunstancias; y por esto muchas de las cosas que dijo han sido ininteligibles o falsamente interpretadas. El Espiritismo es la clave con que todo se explica fácilmente.

La Ley del Antiguo Testamento está personificada en Moisés, y la del Nuevo en Jesús; el espiritismo es la tercera revelación de la Ley de Dios, pero no está personificada en ningún individuo, porque es producto de la enseñanza dada, no por un hombre, sino por los Espíritus, que son las voces del cielo en todas las partes de la Tierra y por multitud de innumerables intermediarios; es, en cierto modo, un ser colectivo que comprende el conjunto de los seres del mundo espiritual, viniendo cada uno a traer a los hombres el tributo de sus luces para hacerles conocer aquel mundo y la suerte que en él les espera.
Asì como Jesús dijo: " No pensèis que he venido a destruir la ley, sino a cumplirla", el Espiritismo dice también  "No he venido a destruir la ley cristiana, sino a cumplirla". No  enseña nada contrario a lo que enseñó Jesús, pero desarrolla, completa y explica, en términos claros para todo el mundo, lo que se dijo bajo la forma alegórica  viene a cumplir en los tiempos predichos, lo que Jesús anunció, y a preparar el cumplimiento de las cosas futuras. Es pues la obra de Jesús  que él mismo preside, asì como a la regeneración que se opera y prepara el reino de Dios en la Tierra como igualmente anunció.

                                                   Allan Kardec

miércoles, 9 de enero de 2013

REFLEXIONES.

Compartamos estas reflexiones en la calma del hogar, o de cualquier lugar en que nos sintamos en paz consigo mismo.




lunes, 7 de enero de 2013

SEGUNDA REVELACION. JESUS DE NAZARET.

Contiuando con el libro "El evangelio segùn el Espiritismo" de Allan Kardec, veamos que nos dice sobre la segunda revelaciòn hecha por los Espìritus de Luz al autor.


JESUS DE NAZARET



Jesùs no vino a destruir la ley; es decir, la ley de Dios, vino a darle cumplimiento, esto es, a desarrollarla, a darle su verdadero sentido, y a apropiarla al grado de adelantamiento de los hombres; por esto se encuentra en  esa ley el principiode los deberes para con Dios y el pròjimo, que son la base de la doctrina, En cuanto a las leyes de Moisès propiamente dichas, por el contrario, las modificò profundamente, ya en el fondo, ya en la forma; combatiò constantemente los abusos de las pràcticas exteriores y las  falsas interpretaciones y no pudo hecerlas sufrir una reforma màs radical que reducièndolas a estas palabras:

"Amar a Dios sobre todas las cosas y al pròji,o como a sì mismo", añadièndo: Esta es la ley y los profetas.
Con estas palabras: "El cielo y la tierra no pasaràn sin que todo sea cumplido hasta una sola jota", Jesùs quiso decir, que era menester que la ley de Dios recibiese su cumplimiento: es decir, que fuese practicada en la Tierra en toda su pureza, con todo su desarrollo y todas sus consecuencias; pues ¿de què servirìa haber establecido esta ley, si quedase subsistente el privilegio de algunos hombres o de un solo pueblo? Sienso todos los hombres hijos de Dios, son, sin distinciòn, objeto de una misma solicitud.
Pero el papel de Jesùs no fue simplemente el de un legislador moralista sin màs autoridad que su palabra; vino a cumplir las profesìas que anunciaron su venida; recibìa su autoridad de la naturaleza excepcional de su Espìritu y de su misiòn divina; vino a enseñar a los hombres que la verdadera vida no està en la Tierra, sino en el reino de los cielos; a enseñarles el camino que conduce a ella, los medios para reconciliarse con dios, y hacer presentir la marha de las cosas futuras, para el cumplimiento de los destinod humanos. Sin embargo, no lo dijo todo, y sobre muchos puntos se limitò a dejar el germen de verdades que èl mismo declara que no pidìan ser comprendidas; hablò de todo, pero, en tèrminos màs o menos explìcitos, porque para entender el sentido oculto de ciertas palabras, era preciso que ideas nuevas y conocimientos nuevos vinieran a dar la clave, y estas ideas no podìan venir antes de cierto grado de madurez del espìritu humano.

                                                Allan Kardec.

domingo, 6 de enero de 2013

REFLEXIONES PARA HOY.

Cada dìa debemos reflexionar para que nuestra mente encuentre el estado de equilibrio fundamental para comenzar con energìa positiva nuestras actividades.







sábado, 5 de enero de 2013

LAS TRES REVELACIONES: MOISES, JESUS Y EL ESPIRITISMO.

Dividiremos este estudio por días para asì poder tratar las tres revelaciones, comenzando por:

MOISES

         "NO PENSEIS QUE HE VENIDO A DESTRUIR LA LEY O LOS PROFETAS; NO HE VENIDO A DESTRUIRLOS SINO A DARLES CUMPLIMIENTO; PORQUE, EN VERDAD OS DIGO, QUE EL CIELO Y LA TIERRA NO PASARAN SIN QUE TODO LO QUE ESTA EN LA LEY SEA CUMPLIDO, HASTA UNA SOLA JOTA Y UN SOLO PUNTO".  (MATEO, CAP V, v 17 y 18)
 La ley mosànica se compone de dos partes distintas, la ley de Dios, promulgada en el Monte Sinaì, y la ley civil o disciplinaria, establecida por Moisès, la una, es invariable, y la otra, apropiada a las costumbres y el caràcter del pueblo, se modifica con el tiempo.

La Ley de Dios està formada en los diez mandamientos:

I.-Yo soy el Señor vuestro Dios, que os saquè de la Tierra de Egipto, de la casa de servidumbre.- No tendrèis dioses ajenos delante de mì.- No hareìs para vos obra de escultura ni figura, de lo que hay arriba del cielo, ni de lo que hay abajo en la Tierra, ni de las cosas que estàn en las agua debajo de la tierra. No las adorarèis ni les darèis culto.

II.- No tomarèis el nombre del Señor vuestro Dios en vano.

III.- Acordaos de santificar el dìa sàbado.

IV.- Honrad a vuestro padre y a vuestra madre para que seàis de larga vida en la Tierra, que el Señor vuestro Dios os darà.

V.- No matarèis.

VI.- No cometerèis adulterio.

VII.- No hurtarèis.

VIII.- No levantarèis contra vuestro pròjimo falsos testimonio.

IX.- No desearèis la mujer de vuestro pròjimo,

X.- No codiciarèis la casa de vuestro pròjimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de las que son de èl.

        Esta ley es de todos los tiempos y de todos los paìses y por lo mismo tienen un caràcter divino.
 Todas las otras son leyes establecidas por Moisès, obligado a contener, por el miedo, a un pueblo naturalmente turbulento e indisciplinado, en que tenìa que combatir abusos arraigados y prejuicios adquiridos en la servidumbre en Egipto. 
Para revestir de autoridad sus leyes, debiò  atirbuìrles origen divino, como lo hicieron todos  los legisladores  de los pueblos primitivos; la autoridad del hombre debìa apoyarse en la autoridad de Dios, pues sòlo la idea de un Dios terrible podìa impresionar a hombres ignorantes, en quienes el sentido moral y el sentimiento de una exquisita justicia estaban aùn poco desarrollados. es evidente que el que habìa establecido en sus mandamientos: "No matarèis, no harèis mal a vuestro pròjimo", no podìa contradecirse elevando a deber el exterminio.
 Las leyes mosaicas propiamente dichas, tenìan, pues, un caràcter esencialmente transitorio.

Capìtulo I pag 34. El Evangelio segùn el Espiritismo.
         

TEMA DE REFLEXION CERRANDO CIRCULOS DE PAOLO COELHO

Hola, gracias por visitar nuestra página de reflexiones y salud mental MENSAJE FRATERNAL, Para hoy les tengo una presentación de una reflexi...